El empaque es un vendedor silencioso que está trabajando siempre, por lo que darle su lugar en la estrategia y el proceso productivo de tu empresa es clave. Sobre todo en empaque de lujo pensado en un público más exigente, para el que el precio no juegue un rol determinante al comprar un producto y que la decisión de compra de empaques de lujo se base en la calidad y alto valor percibido de la marca.
Las exigencias de los consumidores no se reducen al producto en sí y las innovaciones que este ofrezca, sino que las demandas ahora también son de cómo luce: la presentación influye en cómo los consumidores perciben el producto. Hay aspectos claves que debes considerar a la hora de decidir el empaque que le darás a tu cliente. Pensar en estos detalles marcan la diferencia en la experiencia de los usuarios.
Psicología del color
Identificar colores que evocan elegancia es clave, pero además deben tener una relación o combinación adecuada con tu marca. El color de un empaque dice mucho de lo que el consumidor encontrará adentro y habla del rubro del producto. Por ejemplo, si es juvenil, deberá tener colores más alegres; si es para ejecutivos, colores entre negro, dorado y blanco. Es importante que recuerdes que todos los colores tienen un significado y que mentalmente tienen un impacto. También debes considerar las tendencias de color que te posicionará como una marca a la vanguardia. Es importante además, estudiar los colores que tu competencia ocupa ya que puede ayudarte a tomar decisiones en tus diseños.
Un ejemplo claro de color clásico y funcional para empaques de lujo es el negro ya que expresa sofisticación, seriedad y es atemporal. Su combinación con el dorado suele ser un detonante de lujo ya que la combinación transmite poder, lujo e imposición.
Algo que llama la atención ha usado un 92 % el sentido de la vista,6% el sentido del tacto y un 2% el sentido auditivo.
Marketing con el tacto
Una de las principales características de los empaques es su poder de personalización no solo en diseño visual sino en textura. El acercamiento con el producto permite atribuirle a la marca nuevas ideas de ver al producto y a la marca en sí. El neuromarketing indica que el tacto puede acercar al consumidor y provocar en él una experiencia más íntima.
Dentro de la personalización que permiten los empaques de lujo está las texturas que puede ofrecer que pueden ser suaves, según acabados de papel o ásperos con el uso de la madera.
Una publicación de la Universidad de Valladolid señaló que la fidelidad promedio de una marca aumenta un 28% cuando se impulsa un sentido positivamente y puede aumentar hasta un 43% cuando se respalda en dos o tres sentidos.
Así que ya sabes, decidir el tipo de material con el que se cree tu empaque puede marcar la diferencia para cautivar a tu cliente.
Funcionalidad del empaque
Al considerar alternativas para empaques, especialmente de lujo, parte del objetivo es sobresalir con cajas y bolsas poco convencionales. Pero hay que prestar atención al uso, ya que una mala experiencia con el empaque es una mala experiencia con la marca.
El uso de un empaque no puede convertirse solo en algo atractivo, sino que debe ir de la mano con la protección del producto. Ser creativos no significa obviar el objetivo principal de todo empaque: proteger y transportar el producto que contiene.
Al diseñar un empaque para tu producto de lujo, considera lo siguiente:
No hay nada mejor que un empaque fácil de abrir y cerrar.
La protección y lucir bien van de la mano.
Un empaque debe destacar entre los demás.
En SigmaQ entendemos las necesidades, las apuestas y los objetivos de un empaque de lujo. Por ello contamos con materiales de calidad, pensamos en el diseño poniendo a disposición diseñadores in-house para desarrollar el empaque perfecto para tu marca, y somos reconocidos internacionalmente por premios de excelencia de empaque.